Lo
que sí queda claro
En el documento del fallo de la Jueza de Familia, quedó establecido que ese tribunal considera que el único hecho que con certeza se puede determinar es: que Dalton falleció el 10 de mayo de 1975, por ser éste un hecho incluso histórico.
``Sin embargo, las demás circunstancias continúan siendo desconocidas y se parte de suposiciones'', como decir que fue asesinado en el mismo lugar donde fue enterrado o en otro lugar.
Aunque dentro del expediente no se especifica el lugar exacto de la muerte, porque se desconoce a ciencia cierta, la Jueza consideró aceptable _y apegado a derecho_ aplicar normas del Derecho Internacional, fijando a San Salvador como el lugar del fallecimiento.
La notaria Rodríguez Ruiz dijo que la resolución favorable para poder establecer la defunción de Roque Dalton fue gracias a la Jueza, quien _con un amplio criterio_ hizo posible un documento que tiene ``efectos jurídicos de trascendencia'' para la familia.
Por su parte, Juan José Dalton fue enfático al decir que, con este trámite, no se concluye la verdad sobre la muerte del poeta; añadiendo que ``sería bueno'' que los investigadores, historiadores y abogados tomaran el caso de su padre para investigación.
``Sé que (la verdad) afecta a muchas personas públicas, pero en aras del proceso histórico de El Salvador, el pueblo lo debe conocer'', finalizó diciendo.